68 palabras negativas que empiezan por J (con definición)

68 palabras negativas que empiezan por J (con definición)
Elmer Harper

Hay tantas palabras negativas en la lengua inglesa que era difícil encontrar la más negativa que empieza por J, pero lo hemos conseguido. Aquí tienes 68 de las palabras negativas más populares que empiezan por J.

Entre las palabras negativas que empiezan por J se encuentran hastiado, celoso, sentencioso, irritante y sin alegría. Estas palabras pueden utilizarse para transmitir emociones desagradables o negativas en diversas situaciones. Por ejemplo, si alguien se queja constantemente y parece cansado de todo, se le podría calificar de hastiado.

Si alguien siente excesiva envidia de los demás, podría calificarse de celoso. Si alguien emite juicios duros o críticos, podría calificarse de sentencioso. Si algo provoca una reacción desagradable o discordante, podría caracterizarse como discordante.

Ver también: Palabras de amor que empiezan por M (con definición)

Utilizarlos con sensatez puede ayudar a evitar ofender o infligir dolor.

Ver también: Gym Crush Descifrando las Señales de Atracción en el Gimnasio (Interés)

68 palabras negativas que empiezan por la letra J

Parlotear: hablar rápida e ininteligiblemente.
Imbécil: persona estúpida o tonta.
Dentado: que tiene un borde áspero, desigual o irregular.
Hastiado: sensación de cansancio, aburrimiento o falta de entusiasmo, normalmente después de haber tomado demasiado de algo.
Atascado: atascado o incapaz de moverse libremente.
Chocante: que causa conmoción o sorpresa por ser inesperado o estar fuera de lugar.
Ictericia: tener una actitud amarga, prejuiciosa o negativa.
Celoso: que siente o muestra envidia o resentimiento hacia alguien.
Abuchear: burlarse o mofarse de alguien de forma grosera.
Cecina: caracterizada por movimientos bruscos y repentinos.
Jilted: abandonado o rechazado de forma repentina e inesperada.
Gafe: se cree que trae mala suerte o desgracia a alguien o algo.
Parado: sin trabajo ni empleo.
Jocoso: caracterizado por bromear o hacer bromas.
Broma: dicho o hecho en broma; poco serio.
Sacudida: sacudida repentina y violenta.
Sin alegría: carente de felicidad o disfrute.
Temblor: sacudida o vibración violenta.
Prejuicioso: que tiende a juzgar a las personas con dureza o injustamente.
Revuelto: mezclado de forma confusa o desordenada.
Nervioso: nervioso, inquieto o que se asusta con facilidad.
Chatarra: de mala calidad o de fabricación barata.
Jurisdiccional: relativo o que afecta a la autoridad de una jurisdicción concreta.
Justificado: que muestra o demuestra ser correcto o razonable.
Saliente: proyectado hacia fuera o que sobresale bruscamente.
Juvenil: infantil o inmaduro en comportamiento o actitud.
Papada: tener carne o grasa suelta alrededor de la mandíbula inferior o las mejillas.
Prejuicioso: que tiende a juzgar a las personas con dureza o injustamente.
Jactitation: dar vueltas inquieto en la cama, a menudo asociado a trastornos mentales o emocionales.
Dentado: que tiene salientes o puntas afiladas; dentado.
Jerga: confundir o desordenar.
Jerga: lenguaje o vocabulario especializado utilizado por un determinado grupo o profesión, a menudo difícil de entender para las personas ajenas.
Asombroso: extremadamente sorprendente o chocante.
Poner en peligro: poner en peligro o en riesgo.
Jeremiada: queja o lamento largo y lastimero; letanía de desgracias.
Arrojar: lanzar o dejar caer algo de un objeto en movimiento, especialmente para aligerar la carga.
Burla: estar de acuerdo o encajar armoniosamente; hacer un comentario cortante o sarcástico.
Nervioso: nervioso, ansioso o inquieto.
Soborno: prácticas corruptas de los funcionarios consistentes en conceder empleos o favores en beneficio propio.
Jocoso: caracterizado por el humor jocoso o juguetón; poco serio.
Sacudir: sacudir o sacudirse ligeramente; estar desalineado o desequilibrado.
Joiner: persona que trata de unirse o asociarse a un grupo u organización para obtener beneficios.
Sacudida: la cualidad de estar sacudido o tembloroso; aspereza o irregularidad de movimiento.
Anotación: nota o memorándum breve o informal.
Jovial: alegre y amistoso; jovial.
Sin alegría: carente de alegría, felicidad o placer.
Temblar: vibrar o agitarse con un movimiento rápido e irregular.
Juicioso: que tiene o muestra buen juicio; sabio o sensato.
Yugular: relativo a la garganta o al cuello; crítico o vital.
Jugoso: que tiene o muestra una tendencia a ser escandaloso o sensacional.
Jumbo: muy grande, difícil de manejar o engorroso.
Nerviosismo: estado de sobresalto o nerviosismo.
Yonqui: persona adicta a las drogas, especialmente a los estupefacientes.
Chatarrería: lugar donde se almacenan o venden objetos viejos o desechados.
Jurisprudencia: teoría o filosofía del derecho; estudio de los sistemas y principios jurídicos.
Justificable: que se puede justificar o explicar; defendible.
Justamente: de manera justa o moralmente recta; merecidamente.
Yuxtaponer: colocar uno al lado del otro para comparar o contrastar.
Yuxtaposición: acto o instancia de colocar cosas una al lado de la otra para compararlas o contrastarlas.
Pinchazo: golpe o puñetazo rápido y seco, a menudo con un objeto puntiagudo.
Fuga de la cárcel: acto de escapar de la cárcel o prisión, a menudo por medios ilegales.
Tintinear: producir un sonido áspero y discordante.
Jangle: emitir un sonido áspero y discordante; estar nervioso o agitado.
Jar: perturbar o sacudir bruscamente; estar fuera de armonía o acuerdo.
Celos: sentir o mostrar envidia o resentimiento hacia los logros, posesiones o habilidades de alguien.
Jettatura: la supuesta capacidad de causar daño o desgracia con sólo mirar a alguien.
Jingoísta: se caracteriza por un nacionalismo extremo y una política exterior agresiva.
Jitterbug: baile alegre y enérgico popular en los años 30 y 40.

Reflexiones finales

Hemos enumerado las palabras negativas más utilizadas que empiezan por J en este post para que no tengas que averiguarlo tú mismo. Esperamos que esta lista de adjetivos te haya resultado útil. Gracias por dedicar tu tiempo a leerla.




Elmer Harper
Elmer Harper
Jeremy Cruz, también conocido por su seudónimo Elmer Harper, es un escritor apasionado y un entusiasta del lenguaje corporal. Con formación en psicología, Jeremy siempre ha estado fascinado por el lenguaje no hablado y las señales sutiles que gobiernan las interacciones humanas. Habiendo crecido en una comunidad diversa, donde la comunicación no verbal jugó un papel vital, la curiosidad de Jeremy sobre el lenguaje corporal comenzó a una edad temprana.Después de completar su licenciatura en psicología, Jeremy se embarcó en un viaje para comprender las complejidades del lenguaje corporal en varios contextos sociales y profesionales. Asistió a numerosos talleres, seminarios y programas de capacitación especializados para dominar el arte de decodificar gestos, expresiones faciales y posturas.A través de su blog, Jeremy tiene como objetivo compartir sus conocimientos y puntos de vista con una amplia audiencia para ayudar a mejorar sus habilidades de comunicación y mejorar su comprensión de las señales no verbales. Cubre una amplia gama de temas, incluido el lenguaje corporal en las relaciones, los negocios y las interacciones cotidianas.El estilo de escritura de Jeremy es atractivo e informativo, ya que combina su experiencia con ejemplos de la vida real y consejos prácticos. Su capacidad para desglosar conceptos complejos en términos de fácil comprensión permite a los lectores convertirse en comunicadores más eficaces, tanto en el ámbito personal como en el profesional.Cuando no está escribiendo o investigando, a Jeremy le gusta viajar a diferentes países paraexperimente diversas culturas y observe cómo se manifiesta el lenguaje corporal en varias sociedades. Él cree que comprender y adoptar diferentes señales no verbales puede fomentar la empatía, fortalecer las conexiones y cerrar las brechas culturales.Con su compromiso de ayudar a otros a comunicarse de manera más efectiva y su experiencia en lenguaje corporal, Jeremy Cruz, también conocido como Elmer Harper, continúa influenciando e inspirando a lectores de todo el mundo en su viaje hacia el dominio del lenguaje no hablado de la interacción humana.